Señoría Labordeta: El “Abuelo” en el Congreso. Antonio Santaliestra

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Señoria Labordeta Texto 1

Diez años han pasado desde que José Antonio Labordeta falleció y su figura ya es indisoluble a la cultura y sociedad aragonesa del siglo XX. Un personaje que ya ha superado posicionamientos políticos o ideológicos para ser reconocido como una de las personalidades aragonesas de final de siglo aragonés. No solo por la importante aportación cultural de su legado, sino también por su paso por la política, por aquellas dos legislaturas que fue Diputado en el Congreso. Desde 2000 a 2008 Labordeta estuvo dejando su huella en la Carrera de San Jerónimo, siendo posiblemente el Diputado aragonés más conocido de todos los que han pasado por el Congreso representando esta tierra.  A pesar de la soledad que otorga ser el único representante de su partido, la CHA (Chunta Aragonesista), en el Hemiciclo. A pesar de que la mayoría conservadora reinante hasta 2004 poco margen de acción dejara al resto de partidos políticos. A pesar de esas cuestiones, y muchas otras, dejó una huella que va más allá del recordado “¡A la mierda!” que dedicó a los Diputados conservadores cuando lo increpaban en su turno de palabra.

Una huella que se puede rastrear en su acción como Diputado, en su presencia en distintas comisiones y en sus intervenciones. Y eso que el mismo se sentía como “un beduino en las Congreso”. Un sentimiento que el propio Labordeta utilizó para titular su libro de memorias de aquellos años en primera línea de la política nacional y que ahora, junto a los recuerdos del que fue su secretario en el Congreso, Paco Pacheco, han servido de materia prima para que se gestase “Señoría Labordeta”, de Daniel ViñualesCarlos Azagra Encarna Revuelta, editado por GP Ediciones y la Fundación José Antonio Labordeta.

Señoría Labordeta Texto 2

“Señoría Labordeta” es la segunda vez que el mítico cantautor protagoniza un cómic. Ya en el 2018 el mismo equipo artístico y editorial sintetizó la vida del “Abuelo” en el celebrado “TeBeO Labordeta”. Cumplida ya la función con ese volumen de presentar de forma íntegra todas las facetas de este aragonés universal, “Señoría Labordeta” permite ahondar en los años como Diputado. En esa época en la que el cantautor vivió en “villa y corte” y desarrolló una acción política con los pies en el suelo, más pegada a los intereses de las gentes de la tierra que representó que a estrategias de partido. Fueron los años de mayoría absoluta del Gobierno Aznar y del cambio posterior con la primera legislatura de Zapatero. La época de aquel Plan Hidrológico Nacional que ponía las cosas aún más difíciles para Aragón y que quedó derogado posteriormente. Los años de la Guerra de Irak, el atentado de Atocha, el Yak-42,… Hechos históricos todos ellos, y muchos otros, que quedan recogidos en este cómic, que toma muy bien el pulso de la época que vivió Labordeta en las cortes.

Todo ello bajo el prisma de un acertado sentido del humor que ha impregnado Daniel Viñuales (“Saputo” , “La Bondad y la Ira” o “Blanquito”) en su guion, que recoge a la perfección la perspectiva del hombre corriente de la calle que era Labordeta en ese Congreso de los Diputados. Que intentó ser práctico más que dogmático, buscando ante todo la utilidad real de su acción, más allá del marketing político. Con la motivación de que su paso por la cámara quedara recordada como una voluntad legisladora.

Señoría Labordeta Texto 3

En el arte, el ágil trazo de Carlos Azagra (Pepe Buenaventura Durruti”,  “Descubriendo a Mosén Bruno o “El Último Aragonés Vivo”) imprimiendo la fuerza necesaria que requiere el tono de la obra, proporcionando un lenguaje gráfico que es perfecto tanto para reconocer la multitud de personajes de la historia reciente del país como para dar el ritmo que precisan las anécdotas de este acercamiento a la política real. Como siempre, los pinceles de Encarna Revuelta se mantienen en perfecta sincronía con el dibujo de Azagra. Como resultado, asistiremos a páginas redondas que captan en esencia las dimensiones pretendidas en esta obra. Sirva de ejemplo la multitud de guiños y metáforas visuales que hay dibujadas. Como muestra, citaremos las viñetas que retratan como fue la comisión parlamentaria dedicada a investigar lo ocurrido en el atentado de Atocha.

Esto es lo que encontraremos en las 96 páginas editadas en formato cartoné que componen “Señoría Labordeta”, editadas en formato cartoné. Un relato que aúna rigor y humor para ahondar en la figura del “Abuelo” y también para recordar (o descubrir) hechos que ya forman parte de la historia reciente de este país.

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