El Último Aragonés Vivo: Apocalipsis Maño. Antonio Santaliestra

https://heraldodegalactus.com/2019/03/15/el-ultimo-aragones-vivo-apocalipsis-mano-resena/

“Hoy es tres de abril del 2009. 
Me llamo Jorge Gimeno Sanjuán… 
Soy el último aragonés vivo…”

Así comenzaba uno de los cortometrajes aragoneses en clave de humor más refrescantes de los últimos tiempos. Con guion y dirección de David Terrer y protagonizado por el actor Jorge Asín, el corto nos planteaba un escenario post-apocalíptico en el que un virus habría exterminado a todos los aragoneses menos a uno. Jorge, el ultimo aragonés vivo, daba testimonio en una grabación domestica del apocalipsis maño y de su deber como último aragonés vivo. Eso sí, no tenía “un poquico pan” para acompañar los víveres que poseía…

El corto fue un éxito tanto de público como de crítica, cosechando varios premios. La secuela llegó en el 2011 de la mano de Terrer, sumando al protagonismo de Jorge Asín las participaciones ante la cámara de Luis Rabanaque, Miki Nadal y Javier Coronas. De esta manera, el concepto de esta delirante comedia postapocalíptica daba muestras de un potencial enorme para desarrollar más argumentos e hilarantes situaciones que viviera el último superviviente de la comunidad autónoma. Aunque siguiera sin encontrar “un poquico pan”.

En 2014 la distopía apocalíptica aragonesa encontró su continuación en viñetas. GP Ediciones editaba “El Último Aragonés Vivo” y el arte de Carlos Azagra y Encarna Revuelta se sumaban a los guiones socarrones de Terrer en su debut en el noveno arte.

Tras los hechos de los dos cortometrajes (que no son necesarios para leer el volumen aunque sí muy recomendable su visionado) nos encontraremos a Jorge como único habitante en una Zaragoza desértica. La comunidad autónoma de Aragón se ha convertido en un campo de tiro de la OTAN y en la ciudad del Ebro, Jorge se ha instalado en el céntrico “Corte Inglés” del paseo Sagasta, en la planta de menaje. Algo va a perturbar la paz de nuestro protagonista: una invasión de militares franceses pretenden conquistar Zaragoza. Al mando de ese ejército, un antiguo descendiente de un general de las tropas napoleónicas con aires de revancha por la mala experiencia de su antepasado. Ante ese ataque, solo queda Jorge para hacer frente y defender la ciudad. Así, en esta Zaragoza convertida en “tierra maldita” empieza una delirante comedia que nos llevará a recordar “Los Sitios de Zaragoza” a carcajada limpia mientras el único superviviente aragonés protagoniza situaciones hilarantes.

En el noveno arte no hay limitaciones presupuestarias como pueda ocurrir en el cine, tan solo la imaginación. Y esa ausencia de restricciones que otorga este medio  beneficia al tebeo: Terrer consuma todo el potencial que se percibía conceptualmente en los dos cortometrajes previos. En la parte artística, el tándem Azagra-Revuelta apuntala hacia lo máximo el resultado. Junto al orgánico color de Encarna Revuelta nos encontramos a Azagra desencadenando su ágil trazo y reforzando la vis cómica de esta peculiar obra. No hay más que ver la expresividad en los rostros de los personajes que dibuja Azagra para atestiguarlo.

Convertido ya en un clásico moderno del tebeo aragonés, “El Ultimo Aragonés Vivo” cosechó en su momento excelentes ventas y críticas, siendo galardonado con el Premio al Mejor Cómic en el Salón del Cómic de Zaragoza 2014. Desde entonces, la sinergia del equipo artístico del tebeo se ha vuelto a demostrar en dos volúmenes más con nuevas aventuras de Jorge, todas editadas por GP Ediciones.  Editorial que este mes cumple diez años de actividad y que desde aquí nos parecía el momento oportuno poner bajo los focos una de las obras que entendemos insignia de su buen hacer, por la frescura que aún posee este cómic, que sigue levantando carcajadas con cada lector que se cruza.

PD: A día de hoy, Jorge Gimeno sigue sin haber encontrado pan. Pero sí que ha dejado en las redes su primer testimonio  tras el apocalipsis y su primera expedición por tierras aragonesas.